El mercado de la bollería congelada está creciendo y en gran medida esto se debe a que ofrece una gran cantidad de ventajas tanto para el consumidor final como para empresas que ofrecen dichos productos.

¿Qué ventajas podemos encontrar en la bollería congelada?

  • Los procedimientos e ingredientes empleados tanto en la elaboración como en la  congelación de la bollería general son tan seguros y se han desarrollado tanto en los últimos años, que se puede garantizar una muy buena calidad de producto final si se siguen las indicaciones para el horneado final.
  • Posibilidad de controlar la cantidad de bollería que horneas de acuerdo a la demanda.  Como el descongelamiento es un proceso rápido y el horneado también, se puede hornear más producto con poca antelación.   Esto no solo evita el desperdicio de compra piezas de repostería que no se venden y luego hay que tirarlas, o en el mejor de los casos devolverlas sino que te ofrece la posibilidad de ofrecer a tus clientes bollería recién horneada.
  • La bollería congelada es el producto de procesos de elaboración muy controlados, esto garantiza la consistencia en la calidad.  Si a alguien le gusta ir a tu negocio porque le apasionan las napolitanas que ofreces, es importante que siempre estén igual de buenas.

¿Cómo dar el acabado final a la bollería congelada?

Dependiendo del proveedor y del producto,  los tiempos de descongelación y horneado van a variar.  Se deben seguir las indicaciones del proveedor para obtener  el mejor resultado.

La bollería congelada usualmente se recomienda conservarla a –18º C,  vigilando que no se rompa la cadena de frío porque esto incidiría negativamente en la calidad del producto final.

Bollería congelada salada

Evitar descongelamientos parciales para posteriormente volver a congelar, esto no solo hace que las piezas se humedezcan pegándose unas a otras, y disminuyendo la acción de la levadura lo que termina afectando el tamaño y calidad del bollo ya horneado.

Lo ideal es una descongelación gradual en una cámara frigorífica que tenga una temperatura entre 1 y 3º C, pero también en este sentido, lo mejor es seguir las indicaciones que te dé el proveedor.

En cuanto al horneado, el tiempo y la temperatura de cocción van a depender básicamente del tamaño de la bollería que estés preparados.  Algunas piezas ya están listas en poco más de 10 minutos de horno a 170º/180ºC.

Además, tienes que tomar en cuenta que aquellas variedades que tienen un porcentaje más alto de grasa suelen requerir más tiempo de horneado que los que tienen menos.

Seguro que podrás encontrar muy valiosas estas ventajas de la bollería congelada para ofrecer un mejor producto, mejor servicio y tener mayores ventas.